miércoles, 10 de noviembre de 2010

No al Neoliberalismo

Escrito en el que se reproduce parte de un debate con un amigo, ecologista, pacifista, pequeño empresario sobre el modelo económico capitalista neoclásico o neoliberal ###



He encontrado el siguiente Grupo FB:

Dicen en su descripción:

«
NO AL NEOLIBERALISMO

Porque nuestros derechos más básicos deberían estar garantizados por un Estado solvente y fuerte que resuelva las desigualdades entre personas y redistribuya la riqueza de las naciones.

Para que todos los ciudadanos reciban prestaciones en igualdad de condiciones. Por el suficiente hecho de ser ciudadanos.

Porque nuestros derechos a la educación, a la sanidad, a un sistema nacional de pensiones... no deberían estar en manos de unos pocos empresarios.

Porque no queremos estar tan expuestos a los caprichos de la economía internacional. Un Estado social debe garantizar estabilidad a sus ciudadanos a pesar de la situación económica mundial.

Porque creemos en la efectividad de unos servicios públicos de calidad y para todos los ciudadanos.

Porque los derechos de los trabajadores no se recortan ni se negocian

Porque las "autorregulaciones" del mercado siempre afectan a los más humildes.
»


Añadía yo: El neoliberalismo nos empobrece. Salvo a unas pocas grandes fortunas, claro. El Estado Democrático de Derecho y Social, si se usa como garante de unos buenos Servicios Públicos de Estado del Bienestar es una gran solución.

Y, a raíz de esto, se establece un pequeño y considero que interesantísimo debate entre mi amigo Dº D. Gil y yo. Al que, por supuesto, puede incorporarse cualquiera con ganas de aportar. Siempre con respeto y ánimo constructivo, claro.

Haré un "volcado" —es como un vicio por el control, jajaja— de lo que se dijo hasta ahora a continuación.



Dionisio Gil: Papá Estado, que cuide de nosotros. Derechos, muchos derechos, más derechos. Pero se te olvidan las obligaciones.Yo no entiendo los derechos sin previamente las obligaciones cumplidas. Cuando todos tienen los mismos derechos independientemente del cumplimiento de sus obligaciones, se cae en la pereza y la injusticia.


Miguel Ángel: El Estado de Derecho, si es democrático y representativo del ciudadano, es la asociación política de éstos. Es decir, un Estado democrático no debe verse como un "padre sobreprotector" (enfoque del Rex), sino como un instrumento de los ciudadanos (enfoque de la Res publica), una asociación.

Leemos en la Constitución Española:
«
Toda la riqueza del país en sus distintas formas y sea cual fuere su titularidad está subordinada al interés general.
»
Artículo 128.1, Título VII, Economía y Hacienda.

Los derechos y las obligaciones van unidos, efectivamente. Si no, se rompe el equilibrio.

Ahora mismo estamos en desequilibrio, por desgracia. Hay gente saltándose sus obligaciones: grandes fortunas concentradas en muy pocas manos que no tributan fiscalmente como deberían.

Eso hace que el resto de los ciudadanos, la gran mayoría de todos nosotros, perdamos en contrapartida derechos, los Servicios Públicos de Estado del Bienestar que nos hacen a todos iguales en seguridad y dignidad humanas: sanidad, educación, etc. universales de calidad.

Saludos,


Dionisio Gil: Se puede tener más por muchas razones:

- Mayor esfuerzo en tu preparación desde el colegio hasta el final. Todos los días intentando mejorar tus conocimientos.

- Mayor esfuerzo en el trabajo. Viajando fuera de tu pueblo en busca de oportunidades.

- Arriesgar tu pequeño patrimonio en crear una empresa, y trabajar todos los días sin descanso.

- No malgastando en cosas nimias.

- Ser hijo de alguno de los anteriores.

todas ellas me parecen loables.

El primer problema llega cuando los altruistas llegan al poder. Legislan para ser ellos quienes elijan a los que van a ser elegidos. Se autoconvencen que por cuidar del bien común ellos merecen más que los cuidados. Se aseguran por cualquier medio aupar a sus acólitos independientemente de sus méritos.

El segundo es la idiosincrasia propia que nos lleva a buscar un puesto de trabajo seguro de funcionario, donde la palabra servidor público está prohibida desde el primer día, donde el que puede se pierde, etc... si es que no tienes la suerte de ser funcionario y si de tener trabajo piensas que da igual lo que hagas si es productivo o no, a mi que me den mi sueldo con el menor esfuerzo posible. Anda y ahora que puedo trabajo cobrando el paro y así cambio de coche.Luego todos queremos una buena jubilación a los 50, ya la pagará alguien.


Miguel Ángel: Claro que se pueden tener más cosas que otra persona. El principio de igualdad (jurídica, económica, de género...) no debe entenderse como "uniformidad".

El problema viene cuando algunos tienen menos de un mínimo razonable. Si consideramos que el ser humano tiene una dignidad y unos derechos mínimos por nacimiento, no podemos permitir la exclusión económica de nadie por debajo de unos mínimos razonables.

Los países escandinavos, ejemplo de equidad económica, lo son también de dinamismo empresarial, profesionalidad, trabajadores altamente tecnificados...


Dionisio Gil: El mínimo razonable será vivienda digna, sanidad gratuita, 1.500 euros para los gastillos (por persona en la familia), etc... pero la cuestión es que otra familia tendrá que haber ganado el doble de lo que cueste y no importarle ingresarlo para el que no hace nada. Para darle de comer a los funcionarios tenemos que hacer un esfuerzo suplementario.

Fuera de frivolidades, lo que pretendo argumentar es que sin una actitud responsable de cada ciudadano, podemos caer en la pillería de que papá estado tiene la obligación de dármelo, sin importarnos a quien papá estado se lo quita o pide.


Miguel Ángel: Uno acude a la distribución estatal de renta por tramos, la cruza con los tramos de población (p.ej. en deciles), y ve que no sólo hay individuos ganando el doble que otros. ¡Es que algunos ingresan 100 y 1.000 veces más que otros!

Hay gente en situaciones de desventaja económica de todo tipo: quienes sufren una enfermedad, un accidente, quienes están en desempleo laboral de larga duración... al lado de otros que tienen 6 coches deportivos y son accionistas de referencia en 3 empresas multinacionales.

El hecho de ser animal social y vivir en sociedad —sin sociedad no existen empresas, riquezas, coches... ni, por tanto, dueños y beneficiarios de las mismas;
la propiedad privada (dominio, control, exclusión de uso...) de un bien es un acto social que carecería de sentido en la vida de p.ej. un ermitaño, donde no habría ninguna otra persona a la que excluir del uso del bien propio en cuestión—,
conlleva una responsabilidad solidaria para con los otros miembros de la comunidad humana.

De ahí que los Estados Democráticos de Derecho modernos sean también Estados Sociales fundados sobre los principios básicos de libertad, igualdad, solidaridad y responsabilidad, entre otros.

La fiscalidad tributaria progresiva (no regresiva), que grava porcentualmente más a las personas situadas en la parte superior de las rentas y menos a las de la parte inferior, permite que todos disfruten esas cosas mínimas razonables y que el impacto relativo de la contribución tributaria no sea lesivo para quienes soporten gravámenes mayores. Precisamente no es lesivo para ellos por ser éstos los dueños de las grandes fortunas, las personas con el 30% de rentas superiores del Estado. Aunque contribuyan con más que sus vecinos de rentas inferiores en porcentaje y en valor absoluto, no reciben por ello un impacto significativo en su forma de vivir.

De hecho, es que lo contrario económicamente no se sostiene... al menos si se quiere mantener esa justicia económica mínima de la que hablamos, consecuencia de los principios de igualdad y de libertad, éste último en su acepción de "libertad positiva" (o capacidad).

Si se pretende que el peso tributario mayor recaiga proporcionalmente sobre las rentas inferiores, como sucede ahora con el sistema impositivo cada vez más regresivo que tenemos, el Estado deja de tener Ingresos Públicos suficientes para sus políticas. Acaba endeudándose —como ha sucedido— y teniendo que vender sus activos: deuda pública, bonos, escuelas, hospitales, carreteras, canales de agua, cadenas de televisión, cadenas de radio, islas...

La fiscalidad regresiva y/o insuficiente hace inviable el Estado del Bienestar. Nos vamos a una suerte de modelo estadounidense, que ha sido caracterizado por algunos estudiosos de allí no como del primer mundo", sino del "cuarto". Ello en alusión a que tienen la alta industrialización de los países llamados del "primer mundo" pero unas bolsas de pobreza y exclusión económica propias de los países subdesarrollados industrialmente. Espero que no se entienda esto como una crítica generalizada a las cosas yanquis, pues muchas me encantan. Tienen p.ej. una tradición de asociacionismo cívico espectacular.

En cambio, en las sociedades con protección pública fuerte, las bolsas de pobreza se reducen notablemente. También tienen tasas de criminalidad, analfabetismo, mortalidad infantil... mucho más bajas. El Estado del Bienestar no es la panacea, pues nada lo es, pero vemos que genera una sinergia socioeconómica hasta hoy imbatida por ningún otro sistema que se haya practicado.

La cuestión de "la cigarra y la hormiga" a la que apunta es interesante. Se plantea, efectivamente, un dilema moral que debemos abordar: al existir una protección pública considerable, que garantice para todos por igual una seguridad, dignidad y bienestar humanos mínimos, ¿no se aprovecharán entonces unos del trabajo de otros?

Al margen de las hipótesis de partida sobre la naturaleza humana (la picardía, la necedad, el egoísmo, el lobo-hombre de Hobbes, el buen salvaje de Rousseau, etc.), podemos acudir a casos prácticos para hacer alguna deducción.

Allí hace unos años un oficial político escandinavo razonaba sobre sus leyes de inmigración, del tipo llamado "fronteras abiertas", es decir, con requisitos laxos para instalarse allí extranjeros en comparación con los requisitos de otros países. Fue preguntado dicho político por si el modelo escandinavo no accionaría acaso un efecto llamada de inmigrantes más bien vagos que viajasen allí para vivir de la protección pública.

Respondió que su experiencia era que los inmigrantes que se instalaban en el país, comprobaban rápido que vivían mucho mejor si estudiaban —allí estudiar carreras universitarias cuesta muy poco— y trabajaban en algo que si se limitaban a sobrevivir mediante la protección pública.

Eso coincide, además, con la Teoría de las Necesidades de Maslow o Pirámide de Maslow, según la cual los Seres Humanos tendemos a satisfacer nuestras necesidades de modo progresivo: comenzamos por las más básicas y, cuando están satisfechas, progresimos hacia la satisfacción de las demás avanzando por orden de abstracción.

Nos está quedando una conversación muy chula, por cierto :-D Así da gusto conversar y debatir. Hay veces, cuando los interlocutores no valoran mucho la dialéctica y ven al otro como rival y no como compañero que ha pensado algo distinto, que se llega a sudar un poco para decir las cosas y defenderlas. Me ha pasado ya con gente de todo el espectro politico: de las izquierdas, de las derechas, y hace poco con ecologistas ^^'''


Dionisio Gil: Miguel Ángel... me abrumas con tus conocimientos y capacidad para citar a estudiosos del tema. Es un placer contrastar ideas contigo. La verdad es que me molesta un poco (sinceridad) no ponerte cara, pero bueno es tu elección.

¿Cómo podemos conseguir que todo el mundo esté involucrado en ese sistema idílico que describes?

El "rico" busca con sus abogados y asesores (pobres currantes) la manera de contribuir lo menos posible. No me encuentro entre ellos pero te puedo asegurar que algún que otro método de los que usan conozco. Ponemos muchos funcionarios en Hacienda, impedimos ordeñar una empresa un año y al año siguiente que de perdidas y pueda despedir a todo el mundo, legislamos para que el impago no sea una profesión de la que los bancos hacen negocio,... (esto da para otro dia).

El "pobre" busca ingresos B, unas peonadas (estoy en Andalucía) y tiene dos o tres subsidios en la familia, deja de trabajar (en otras épocas) para cobrando el paro realizar un trabajo donde no cotiza (conozco muchos ejemplos con nombres y apellidos), se saca la tarjeta del Carrefour enseñando el DNI y se gasta los 3.000 en caprichos, sabe que si paga una cuota (50 euros) le recargan la tarjeta, y se vuelve a gastar otros 3.000 que no piensa devolver....Yo he estado este verano en Noruega y he visto que en una tienda con cuatro puertas sólo había una dependienta que no tenía que preocuparse de que nadie se llevase nada sin pagar. Si haces esto aquí, la ruina la tienes asegurada.En fin, creo que no para cualquiera sirve la misma receta. A nosotros (España) nos hace falta mucho para podernos aplicar el sistema nórdico.

Recetas:......................

Está la cosa difícil. Mientras que dejes sin denunciar lo que pasa a tu lado y lo veas casi con envidia... y a cualquier oportunidad tu aproveches para aprovecharte... poco de las reflexiones anteriores nos llevarán a ningún sitio. No creo que la solución sea mano dura, es que creo que no tenemos solución (quiero decir que no se me ocurre).

Un saludo.


Silvia: Es un gustazo leeros a los dos, es todo lo que puedo decir, y que estamos en sintonía, ahora continúo con mi trabajo, me relajo leyendoos.


Miguel Ángel: A.t.t. Dionisio: A falta de leer su —o "tu", me sale solo el tratamiento de "vd." ^^'''' jijiji— último escrito en esta publicación, dejo lo siguiente que he preparado mientras sorbía el primer café de la mañana ;-) Luego voy con lo otro.

Al hilo de lo que decía anoche, en un sistema en el que se protege más al dinero —a quienes tienen, claro— que a las personas, se hacen más difíciles, de hecho, cosas como iniciar empresa propia o tecnificarse y cualificarse como trabajador o profesional.

El neoliberalismo nos dice: hay que sacar toda la regulación legal posible de la Economía porque, en el modelo teórico de competencia perfecta, el mercado siempre es eficiente en la asignación de los recursos económicos entre la población. Se obtiene, lo que se llama un óptimo paretiano.

En la práctica vemos que si se sacan ciertas leyes reguladoras de la Economía aumenta la ineficiencia, justo al contrario de lo que defienden las tesis neoliberales o neoclásicas. ¿Por qué? Porque el modelo económico de competencia perfecta es un modelo ideal y utópico con unos requisitos o presunciones muy exigentes que nunca se dan en la realidad como, entre otros: información perfecta y completa, inexistencia de costes de entrada y salida empresarial de los mercados, ofertantes y demandantes precio-aceptantes, productos homogéneos e indiferenciados...

En la práctica, si no aplicamos leyes de defensa de la competencia mercantil, se producen fallos de mercado como el monopolio, el oligopolio o la competencia monopolística.

Si no aplicamos salarios mínimos interprofesionales suficientes y dignos, en lugar de aumentar el dinamismo del mercado laboral, lo que conseguimos es que bajen los salarios y se acabe cayendo en una Recesión y posterior Depresión económica por una caída de la Demanda Agregada.

Si no permitimos —y garantizamos— la negociación colectiva laboral, a través de sindicatos independientes que representen a sus afiliados (anónimos) frente a la dirección de las empresas, nos encontramos con que la empresa negocia con cada trabajador individualmente sus condiciones laborales y, lógicamente, dado que el poder de negociación cae casi todo la mayoría de las veces, del lado de la mesa en el que se sienta la empresa, el trabajador ve como sus condiciones de trabajo empeoran.

Vamos con algunos datos empíricos que me parecen interesantes y explicativos de que una economía de mercado altamente desregulada, como defiende el neoliberalismo, nos deja como fruto unos problemas socioeconómicos que se solucionan en las economías de mercado mixtas —donde el Estado interviene para resolver los fallos de mercado en eficiencia y equidad macroeconómicas— acompañadas de un Estado del Bienestar importante.
  • El Foro Económico Mundial de 2008 consideró a Suecia como el tercer país más competitivo del mundo. Vemos que el país con el Estado del Bienestar más protector del mundo y la Política Fiscal más exigente y progresiva (no regresiva), mantiene una estructura de empresas potentes y competitivas. No se está favoreciendo pues, unas temibles e indeseables por todos vagancia, apatía, pereza, etc.
  • Dinamarca tiene los salarios más altos del mundo, según un estudio publicado por UBS AG (antigua Unión de Bancos Suizos) en el 2009
  • Dinamarca además tiene el nivel más grande de igualdad de ingresos del mundo, que podemos medir utilizando p.ej. indicadores como el Índice de Gini
  • Según el Índice de Paz Global 2009, Dinamarca es el segundo país más pacífico del mundo
  • Dinamarca tiene el mejor clima para hacer negocios en el mundo, según la revista de negocios Forbes, 2009

Estos datos de 2.009 de los institutos neoliberales Cato y Fraser nos muestran, también, por dónde van los tiros para los pensadores neoliberales (economistas neoclásicos) como ellos:
  • Singapur, Nueva Zelanda, Chile y Estonia tienen un grado de "libertad económica" mayor que Dinamarca y Finlandia
  • Taiwan, Kuwait, Checoslovaquia y Costa Rica tendrían una mayor "libertad económica" que Noruega
  • Malta, El Salvador, Emiratos Árabes Unidos, Hungría, Lituania, España, Chipre y Honduras obtendrían una mayor puntuación que Suecia

Es decir, vemos que la "libertad económica" que miden y preconizan dichos foros de pensamiento económico neoliberal, no comporta necesariamente las connotaciones que todos entenderíamos si no nos ponemos a estudiar a fondo el tema.

Encontramos las fuentes bibliográficas de esos datos siguiendo el hiperenlace: ciudadanopublico.blogspot.com/2010/04/el-valor-de-la-igualdad.html

A continuación cito algo que preparé a mediados del año pasado y que me parece también de utilidad ilustrativa:
« (...) Algunos dicen que tenemos el sector público [en España] sobredimensionado, que hay demasiados contratos públicos, demasiadas plazas públicas de empleo. La frase que más se usa es "hay demasiados funcionarios".

En su artículo "¿Demasiados funcionarios?", el Sr. Navarro nos ilustra que esta percepción es falsa, a pesar de estar muy extendida.

En España, el porcentaje de personas que trabajan para el sector público es del 9%. En la Unión Europea de los 15, dicho porcentaje es del 16% en promedio. En los países escandinavos, que son aquéllos cuya economía es más emprendedora y eficiente según señalaba hace poco la Organización para la Cooperación y el Desarrollo (O.C.D.E.), y que son aquéllos donde existe más equidad social, como señalaba y analizaba yo mismo en escritos anteriores, el porcentaje de personas que trabajan para el sector público es del 19% para Finlandia, del 22% para Suecia y del 26% para Dinamarca.

(...) Nosotros escogemos: o hacemos inversión pública en sanidad, educación y justicia o cada vez tendremos que hacer más en fuerzas armadas y de seguridad.

Los dos países que más dispersión de la renta, qué más falta de equidad económica tienen, de la O.C.D.E. son España y U.S.A. Los países que menos dispersión de la renta tienen de los adscritos a dicha organización son los países escandinavos (...)

Los dos países que más tiene que gastar en fuerzas de seguridad, por la falta de cohesión social y por sus tasas de criminalidad son... España y U.S.A. España gasta el 2,1% de su P.I.B. y U.S.A., el 2,2% del suyo.

Los países que menos tienen que gastar en ese apartado son... los países escandinavos. Suecia gasta el 1,3% de su P.I.B., Noruega el 0,9% y Dinamarca el 0,9% también.
(...) »

¡Voy a por el segundo café y vuelvo dentro de un rato! :-D


El debate continuó. Pueden leerlo hasta el final en fb, siguiendo este enlace a fb: www.facebook.com/note.php?note_id=167678646591358.

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